Según el informe ICEX sobre Internacionalización, empleo y modernización de la economía española: “La internacionalización puede impulsar la recuperación del mercado laboral, generar ganancias en productividad y en competitividad, así como riqueza, bienestar y un crecimiento sostenible; los ingredientes necesarios para contar con una economía más moderna.”
Es decir, la internacionalización se presenta para las empresas como un mundo de oportunidades en cuanto a su crecimiento. La consultora BusinessGoOn, especializada en internacionalización de empresas, ha lanzado una lista con las principales ventajas de iniciar este proceso:
1. Evitar el peligro del ‘pez grande.’
Uno de los principales efectos de este proceso es el impedimento de que algunas de las pymes desaparezcan, evitando el peligro del pez grande.
2. El tamaño importa.
Cuando una empresa decide internacionalizarse se convierte, directamente, en una empresa dos veces más grande que aquellas que no exportan y que aquellas que no invierten, según cifras de la propia consultora.
3. Mayor competitividad.
Estar en el extranjero nos permite aprender de competidores a nivel global. Esto se traduce en mayor competitividad y cualificación que aquellas que no se encuentran internacionalizadas, ya que prepara a los empleados ante mayores retos.
4. Paraguas anticrisis.
Las empresas más competitivas tienen menor riesgo de verse afectadas por la crisis. Las ventas en diferentes países permiten a las empresas internacionalizadas la disminución de dependencia de un solo mercado. Esto puede beneficiar mucho a la empresa compensando la caída que se puede producir en caso de crisis económica en algunos de los mercados.
5. Un bocado emergente.
La internacionalización en países emergentes supone para las empresas encontrar oportunidades en mercados con potencial de crecimiento.
6. Ajustar los costes.
La internacionalización permite aprovechar las economías de escala trasladando partes de la cadena de valor a localizaciones más competitivas, permitiendo ahorrar costes.
7. Una integración plena.
La internacionalización no es una estrategia a corto plazo, sino que se supone una integración completa en todos los sentidos: conocer la competencia a nivel global, las particularidades de los diferentes mercados y economías.
8. Mejora la motivación del trabajador.
Trabajar a nivel global implica que los trabajadores se sientan parte de una gran familia favoreciendo los intercambios culturales y mejorando la motivación.
9. Afianzar la marca.
La internacionalización también se mide en términos de reputación, ya que está ligado a términos de crecimiento, decisión y fortaleza.
Sin embargo, para llevar a cabo este proceso de internacionalización es necesario asentar bien las bases y contar con los requerimientos básicos y de asesoramiento. En Credilex te ofrecemos el asesoramiento jurídico integral que necesitas para llevar a cabo el proceso de internacionalización
de tu empresa.